FORD NUCLEON 1958

El automóvil del futuro que sólo quedó reflejado en forma de maqueta.

FORD NUCLEON 1958

 

HISTORIA - CARACTERÍSTICAS:


Para entender este prototipo, debemos situarnos entre los año 1950 y 1960, donde el mundo veía con gran furor y entusiasmo la implementación de la energía nuclear como la nueva forma de crear energía a bajo costo y de una durabilidad casi ilimitada. De esta intención, se pensó en este proyecto el cual nunca llegó a plasmarse en la vida real y sólo quedó en forma de maqueta; de todos modos en la imagen se puede observar las líneas futuristas que iba a tener este vehículo, teniendo en cuenta que su propulsión en vez de tener un motor de combustión interna, iba a ser reemplazado mediante la implementación de un reactor en miniatura o como se lo denominaría en su época: “Cápsula de potencia”.
A modo de aclaración, debemos mencionar que el movimiento necesario para poner en funcionamiento al vehículo, provendría del calor generado a través del calentamiento producido por la reacción en cadena del reactor, y que a través de dos turbinas (una para dar energía a las ruedas y la otra para brindar electricidad a los demás elementos de confort y de seguridad), transformaría la energía calórica en energía mecánica.
A simple vista, exteriormente se puede diferenciar que el Ford Nucleon lo conforman dos partes: la primera, formada por el bastidor, la cabina y los ejes y la segunda parte, quedaba reservaba para dar el espacio necesario para contener la unidad de propulsión (reactor), con todos los elementos de seguridad acordes para el manejo de este tipo de elemento. El posicionamiento de la cabina, lo más alejada del reactor, era a los fines de brindar una mayor protección tanto al conductor como a sus pasajeros.
De haberse construido, los que lo diseñaron, calculaban que su autonomía rondaría los 8.000 Km. y su “cápsula” de uranio enriquecido una vez agotada, se podría intercambiar en una estación de servicio por otra que tuviera su carga al máximo.
Teniendo en cuenta la inversión de este proyecto, el peso y la seguridad (a nivel radiactivo) que tenía que tener esta unidad para poder salir a la calle, el mismo no pudo llevarse a cabo ni siquiera en un modelo de prueba, quedando su concepto reflejado en maquetas y planos realizados en hojas de papel. 

 


Referencia / Fuente de la imagen:

https://flic.kr/p/opyvZa


 

 

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FORD NUCLEON 1958

El automóvil del futuro que sólo quedó reflejado en forma de maqueta.
10 de mayo, 2020
FORD NUCLEON 1958

 

HISTORIA - CARACTERÍSTICAS:


Para entender este prototipo, debemos situarnos entre los año 1950 y 1960, donde el mundo veía con gran furor y entusiasmo la implementación de la energía nuclear como la nueva forma de crear energía a bajo costo y de una durabilidad casi ilimitada. De esta intención, se pensó en este proyecto el cual nunca llegó a plasmarse en la vida real y sólo quedó en forma de maqueta; de todos modos en la imagen se puede observar las líneas futuristas que iba a tener este vehículo, teniendo en cuenta que su propulsión en vez de tener un motor de combustión interna, iba a ser reemplazado mediante la implementación de un reactor en miniatura o como se lo denominaría en su época: “Cápsula de potencia”.
A modo de aclaración, debemos mencionar que el movimiento necesario para poner en funcionamiento al vehículo, provendría del calor generado a través del calentamiento producido por la reacción en cadena del reactor, y que a través de dos turbinas (una para dar energía a las ruedas y la otra para brindar electricidad a los demás elementos de confort y de seguridad), transformaría la energía calórica en energía mecánica.
A simple vista, exteriormente se puede diferenciar que el Ford Nucleon lo conforman dos partes: la primera, formada por el bastidor, la cabina y los ejes y la segunda parte, quedaba reservaba para dar el espacio necesario para contener la unidad de propulsión (reactor), con todos los elementos de seguridad acordes para el manejo de este tipo de elemento. El posicionamiento de la cabina, lo más alejada del reactor, era a los fines de brindar una mayor protección tanto al conductor como a sus pasajeros.
De haberse construido, los que lo diseñaron, calculaban que su autonomía rondaría los 8.000 Km. y su “cápsula” de uranio enriquecido una vez agotada, se podría intercambiar en una estación de servicio por otra que tuviera su carga al máximo.
Teniendo en cuenta la inversión de este proyecto, el peso y la seguridad (a nivel radiactivo) que tenía que tener esta unidad para poder salir a la calle, el mismo no pudo llevarse a cabo ni siquiera en un modelo de prueba, quedando su concepto reflejado en maquetas y planos realizados en hojas de papel. 

 


Referencia / Fuente de la imagen:

https://flic.kr/p/opyvZa