MOLLER M400

El “auto-avión” con despegue vertical que nunca llegó a comercializarse.

MOLLER M400

 

HISTORIA - CARACTERÍSTICAS:


A finales de la década de los años 50, el ingeniero Paul Moller soñó con un auto volador liviano que transportara a cuatro pasajeros y fuera capaz de aterrizar y despegar verticalmente desde cualquier calle o espacio urbano, para luego levantar vuelo a gran altitud y velocidad. Pasados 30 años y 30 millones de dólares después, Moller fundó en el año 1983 la compañía: “Moller Internacional”. En ese entonces se decía que el futuro prototipo, se conduciría como un auto, despegaría como un helicóptero y volaría como un avión. Tendría el mismo tamaño que un coche, andaría cinco veces más rápido y podía mantenerse en el aire a una altura de 15 metros.
El primer prototipo se llamó: “M200X”. Tenía la forma de un plato volador, pero en la práctica, era una cruza entre un “Corvette” y un jet. Su propulsión estaba hecha con 8 motores rotantes que generaban 200 caballos de fuerza cada uno, siendo éste, una versión modificada del motor típico del “snowmobile” (el vehículo que se utiliza para andar por la nieve). Sin embargo los expertos prefieren compararlo con el auto deportivo “Mazda RX7”, sólo que en este caso el motor se encuentra enfriado por aire.
Algunas de las características interesantes de este platillo, era que si uno de sus motores fallaba, no tenía ningún tipo de inconvenientes en aterrizar normalmente, aún con dos de sus motores destrozados. Además, se aseguraba también el bienestar de los ocupantes mediante paracaídas que se eyectaban en caso de emergencia.
A su vez, Moller firmó varios contratos militares para desarrollar su proyecto a nivel defensa, siendo uno de ellos directamente con el Departamento de defensa norteamericano de ese entonces, donde se comprometió a crear un “platillo” de dimensiones pequeña sin piloto, para ser usado como vehículo de inspección de puentes y a su vez, como detector y destructor de minas.
En el año 2001, el nuevo proyecto de Moller denominado “M400 Skycar”, levantó vuelo por primera vez. La idea de este prototipo era convertirse en un medio aéreo de transporte personal, basado en su capacidad de despegue y aterrizaje vertical, usando cuatro toberas de inclinación variable. Su funcionamiento era bastante práctico: Al producirse el despegue, una serie de “cortinas metálicas colgantes” estaban diseñadas para dirigir el empuje de las hélices hacia abajo; pero cuando el vehículo alcanzaba la altitud deseada, las mismas volvían a su posición horizontal, de manera que el empuje pase directamente y genere el movimiento hacia adelante. El M400 estaba preparado para ascender a 180 Km/h y navegar a una velocidad de 500 Km/h. “Nada de pedales ni palancas de cambios”…, explicaba el inventor; “basta con apuntar un control remoto en la dirección en donde se quiere ir y listo”.
Su construcción estaba realizada con materiales livianos tales como el vidrio, el Kevlar y la fibra de carbono. Esta “limusina de alta velocidad”, pesaría menos de 1.100 Kg., permitiendo que el prototipo pueda entrar en cualquier garaje normal. Tuvo un gran número de pedidos por ese entonces, inclusive, Michael Jackson había reservado uno.
El único dilema que existía, era si el auto volador sería utilizado como un simple helicóptero mejorado o si tendría el impacto histórico del modelo “T” de Henry Ford. Según el director de la tecnología civil de la NASA (John Zuk), este prototipo iba a revolucionar el transporte moderno, ya que era fácil de volar, barato y muy seguro.
Evidentemente, y ya viendo esta novedosa creación a la distancia, pasado ya los años, dicho proyecto se orientó más a ser un vehiculo militar “de aire”, y no a un público dirigido al uso civil.
Cabe agregar, que otra desventaja que se ponía como barrera para la producción en masa de estos vehículos, era la existencia de una carretera electrónica, que estos autos voladores deberían seguir mediante satélite; de lo contrario, se transformaría en un caos la seguridad de circulación en el espacio aéreo, si se vendieran en cantidad al público en general. 

 


Referencia / Fuente de la imagen:

https://flic.kr/p/NcRaGt


 

 

Clasificados MiTUTU - El sitio integral del automotor en Rosario y zona
MOLLER M400

El “auto-avión” con despegue vertical que nunca llegó a comercializarse.
23 de enero, 2020
MOLLER M400

 

HISTORIA - CARACTERÍSTICAS:


A finales de la década de los años 50, el ingeniero Paul Moller soñó con un auto volador liviano que transportara a cuatro pasajeros y fuera capaz de aterrizar y despegar verticalmente desde cualquier calle o espacio urbano, para luego levantar vuelo a gran altitud y velocidad. Pasados 30 años y 30 millones de dólares después, Moller fundó en el año 1983 la compañía: “Moller Internacional”. En ese entonces se decía que el futuro prototipo, se conduciría como un auto, despegaría como un helicóptero y volaría como un avión. Tendría el mismo tamaño que un coche, andaría cinco veces más rápido y podía mantenerse en el aire a una altura de 15 metros.
El primer prototipo se llamó: “M200X”. Tenía la forma de un plato volador, pero en la práctica, era una cruza entre un “Corvette” y un jet. Su propulsión estaba hecha con 8 motores rotantes que generaban 200 caballos de fuerza cada uno, siendo éste, una versión modificada del motor típico del “snowmobile” (el vehículo que se utiliza para andar por la nieve). Sin embargo los expertos prefieren compararlo con el auto deportivo “Mazda RX7”, sólo que en este caso el motor se encuentra enfriado por aire.
Algunas de las características interesantes de este platillo, era que si uno de sus motores fallaba, no tenía ningún tipo de inconvenientes en aterrizar normalmente, aún con dos de sus motores destrozados. Además, se aseguraba también el bienestar de los ocupantes mediante paracaídas que se eyectaban en caso de emergencia.
A su vez, Moller firmó varios contratos militares para desarrollar su proyecto a nivel defensa, siendo uno de ellos directamente con el Departamento de defensa norteamericano de ese entonces, donde se comprometió a crear un “platillo” de dimensiones pequeña sin piloto, para ser usado como vehículo de inspección de puentes y a su vez, como detector y destructor de minas.
En el año 2001, el nuevo proyecto de Moller denominado “M400 Skycar”, levantó vuelo por primera vez. La idea de este prototipo era convertirse en un medio aéreo de transporte personal, basado en su capacidad de despegue y aterrizaje vertical, usando cuatro toberas de inclinación variable. Su funcionamiento era bastante práctico: Al producirse el despegue, una serie de “cortinas metálicas colgantes” estaban diseñadas para dirigir el empuje de las hélices hacia abajo; pero cuando el vehículo alcanzaba la altitud deseada, las mismas volvían a su posición horizontal, de manera que el empuje pase directamente y genere el movimiento hacia adelante. El M400 estaba preparado para ascender a 180 Km/h y navegar a una velocidad de 500 Km/h. “Nada de pedales ni palancas de cambios”…, explicaba el inventor; “basta con apuntar un control remoto en la dirección en donde se quiere ir y listo”.
Su construcción estaba realizada con materiales livianos tales como el vidrio, el Kevlar y la fibra de carbono. Esta “limusina de alta velocidad”, pesaría menos de 1.100 Kg., permitiendo que el prototipo pueda entrar en cualquier garaje normal. Tuvo un gran número de pedidos por ese entonces, inclusive, Michael Jackson había reservado uno.
El único dilema que existía, era si el auto volador sería utilizado como un simple helicóptero mejorado o si tendría el impacto histórico del modelo “T” de Henry Ford. Según el director de la tecnología civil de la NASA (John Zuk), este prototipo iba a revolucionar el transporte moderno, ya que era fácil de volar, barato y muy seguro.
Evidentemente, y ya viendo esta novedosa creación a la distancia, pasado ya los años, dicho proyecto se orientó más a ser un vehiculo militar “de aire”, y no a un público dirigido al uso civil.
Cabe agregar, que otra desventaja que se ponía como barrera para la producción en masa de estos vehículos, era la existencia de una carretera electrónica, que estos autos voladores deberían seguir mediante satélite; de lo contrario, se transformaría en un caos la seguridad de circulación en el espacio aéreo, si se vendieran en cantidad al público en general. 

 


Referencia / Fuente de la imagen:

https://flic.kr/p/NcRaGt